Zofia (Bree Olson actriz XXX estadounidense)
Zofia es maniatada y puesta a merced (voluntariamente) por su amigo/amante/compañero Claudio.
Esta
historia comienza en un dormitorio. De momento vació. De un lado una
cama, al lado un escritorio y una mesa de noche (contra la pared
donde se haya la ventana que da al exterior), en la pared enfrente a
la cama hay un armario, y en la ultima (frente al escritorio) la
puerta de entrada.
Se
escuchan ruidos afuera y risas...la puerta se abre de repente y
entras dos personas. Zofia una chica de estatura media, cabello
rubio, pechos medianos y buen trasero y su novio/amante/amigo con
derechos Claudio. Se están besando apasionadamente y acariciando. El
la toma en brazos y la sienta sobre el escritorio donde se siguen
besando. Ella le mira y dice:
-Me
haces arder-
-Tu
mas Zofi. Estoy muy caliente. Pero ahora lo estarás un poco mas-
-¿Que
tienes en mente?-
-Parate
en medio de la habitación, con las manos detrás de la cintura y de
espaldas a mi-
Zofia obedecía. De reojo observa como abría un cajón del escritorio y
sacaba una caja, y de las misma unas sogas.
Al
momento se entera para que son cuando las uso para atarle las muñecas detrás de la cintura. Las ataduras eran firmes pero no como
incomodarla e inclusive, si quisiera, a la rubia no le costaría nada
desatarse. Era un juego que estaba dispuesta a jugar.
Claudio,
tras atarla, le dijo al oído -Ahora
seras mi prisionera-
Acto
seguido le rodeo con el brazo izquierdo, por encima del pecho, y tras
darle un beso descendió su mano derecha hasta debajo de la falda y
comenzar a masturbarla. Ella empezó a gemir mientras el estimulaba su sexo. Echo la cabeza
hacia atrás recostándola sobre el hombro de el.
Lentamente la masturbación la llevo a
que se “mojara” que su vagina se humedeciera. Cuando Zofia se lo
dijo el se detuvo y, para su sorpresa, paso otra soga alrededor de
los antebrazos y el torso. Ahora con los brazos inmovilizados por
ambas ataduras Claudio hace que ella se recueste sobre el escritorio.
De pie ante el mueble, boca abajo y con el torso apoyado sobre la
superficie del mismo, ve como su amigo saca varios
dildos/consoladores de la caja. Para después bajarle la bombacha
(llevaba una falda puesta).
Zofia
cierra los ojos cuando Claudio le introduce un dildo/consolador no
rigido y de unos 15 centímetros en la vagina. El lo mueve de adelante
hacia atrás con la mano izquierda mientras la derecha se apoya en la
parte baja de la espalda de ella. La rubia se ríe mientras el suave
juguete le hace cosquillas dentro.
Un
rato después cambia de dildo/consolador por un de 20 centimetros y
mas rigido. El se ubica directamente detrás de ella, la toma de la
cintura con la mano izquierda y con la derecha la comienza a
penetrar. Ella suelta pequeños gemidos mientras el dildo/consolador
entra y sale dentro suyo. Se va humedeciendo cada vez mas. El le toma
un glúteo y lo aprieta un poco.
Llevan así un rato hasta que el decide darla vuelta. Zofi se siente
“vulnerable” con las piernas abiertas, recostada sobre el
escritorio boca arriba y maniatada. Lo observa y se miran fijamente a
los ojos por un momento hasta que el se arrodilla y comienza a
practicarle sexo oral. Le pasa la lengua por el clítoris y la entrada de su ya humedecida vagina. Ella comienza a gemir.
Claudio se detiene para sacar un tercer dildo/consolador de 25 centímetros de lo largo y se lo comienza la penetra mientras prosigue con el
oral. El juguete firme y la lengua de el la enloquecen. Ella gime
constantemente.
-¿Sabes
Zofi...prisionera?-Comenta el-Tus
gemidos...me distraen- Para acto
seguido taparle la boca con la mano izquierda mientras con la derecha
la seguía penetrando con el dildo/consolador.
Estuvieron
un buen rato asi. Ella totalmente inmovilizada y de piernas abiertas.
Mientras el de pie, enfrente, entraba en su sexo el juguete mientras
le tapaba la boca.
Claudio
estaba tan excitado como ella. Viéndola sonrojada, sudando,
escuchando algún gemido de placer (a pesar de la boca tapada) y sus
ojos cerrados para sentir con los otros sentidos.
Saco
el dildo/consolador y observo lo bien húmedo que estaba.
-¿La
estas pasando bien?”- le pregunto
el. A lo que ella asintió con la cabeza.
Le
quito la mano de la boca, para dejarla respirar un poco, mientras
sacaba un largo pañuelo de caja. Tras un minuto le amordazo la boca
con el y la alzo en brazos para arrodillarla delante de la cama, con
el torso recostado sobre la misma boca abajo. Zofia se volteo y
alcanzo a ver como se bajaba el pantalón y después dejaba al
descubierto su firme y erecto pene. “Ahora
me toca a mi gozar un poco mas”
dijo Claudio ante de tomarla de la cintura y penetrarla.
Adelante
y hacia atrás, era el movimiento de la cadera de el. Zofia
totalmente maniatada se dejaba hacer sintiendo el calor del pene de
el dentro de ella. La penetración se extendió por un rato mientras
con la vagina lubricada, por toda la previa, haciendo todo mas
placentero.
Cuando
llego al orgasmo y eyaculo Claudio emitió un suspiro de placer.
Derramo cada gota dentro de Zofia hasta que no quedo mas.
Unos
segundos después se separo de ella y se levanto el pantalón. Zofia
volteo y lo miro a los ojos, su frente estaba perlada por el sudor y
respiraba algo agitada. El tener la boca cubierta por el pañuelo
hacia que sus ojos, sus hermosos ojos, resaltaran. Algo en su mirada pareció indicar que esperaba que su compañero le quitara el pañuelo
y liberara los brazos.
Claudio
lo percibió- ¿Crees que esto acabo
prisionera?-. A lo que ella levanto
una ceja expresando algi de incredulidad- Aun
no terminamos señorita.
Acto
seguido la levanto y la cargo sobre un hombro. Y asi, maniatada y sin
bombacha, Claudio se la llevo a otra habitación “mas privada”.
Mientras le decía -La diversión...acaba de comenzar.